Recuerdo que de pequeña tú eras la cosa más importante para mi y sé que al igual lo era yo para ti. Andaba detrás de ti, buscándote desesperadamente, porque me daba miedo perderte y tú eras la persona que podía hacerme la niña más feliz de la tierra.
Cada mañana me levantaba ansiosa para que me abrazaras y jugaras conmigo. Ninguna muñeca, juguete o videojuego podía reemplazarte, siempre pasaba pegada a ti, tu calor me da daba seguridad, tus brazos cariño y tu corazón me brindaba un amor inmenso. No existía nadie mejor que tú para mi.

Ahora veo las cosas muy distintas, comprendo que fui una persona sumamente egoísta y te pido perdón por todo el daño que pude haberte causado. Actualmente soy madre y sé lo que dolería que un hijo me hiriera de esa manera. Hoy quiero que sepas que a pesar de todo, te agradezco, porque gracias a ti soy la persona que soy, te sigo admirando tanto como antes, te amo infinitamente, y eres una de las personas más importantes de mi vida y sé que de la misma manera lo soy para ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario